Será el domingo 29 de junio a las 17 hs. en la antesala del Aula Magna de la UNPLPam.
Sinopsis de la obra
Franca es viuda y no llega a los veinte años de edad, una Antígona encadenada en la explanada municipal de su pueblo. Pide justicia por el “marido” muerto que ha sido asesinado. Frente a señoras que han arrastrado sus reposeras por la calle para tener el mejor lugar en la fiesta del hachero, Franca pasará todo un día visitada por personas que parecen fantasmas y fantasmas que son pura realidad. Hace calor, la música crece, el dilema de Franca también: qué es al fin vivir sino elegir alguna muerte.
- Duración (en minutos): 80
- Género: cuasi tragicomedia musical pampeana
- Público al que está dirigida: Personas adolescentes y adultas
- Actuación: Juliana González Carreño, Vicente Ibarra, Melina Simpson, Rossana Senoseain, Agustina Biscayart Abram, Julieta Rossi, Mauricio Ochoa, Marcos Vilaseca
- Diseño sonoro: Nicolás Diab y Agustín Flores Muñoz
- Arreglos musicales: Mauricio Ochoa
- Diseño de iluminación: José Jerónimo
- Producción audiovisual: Emilia Gaich y Gabriela González
- Fotografía: Emilia Gaich
- Diseño gráfico: Emilia Gaich y Gabriela González
- Difusión: Julieta Rossi, Marcos Vilaseca y Mauricio Ochoa
- Construcción dispositivo escénico: Guillermo Simpson
- Electricidad: Prudencio Fernández
- Asistencia técnica: Tiago Dacal
- Producción: Laura Gómez
- Dramaturgia y dirección: Mariana Roseró
Entradas adelantadas: por WhatsApp al número 2954-591679
Génesis de la obra
Da origen a esta obra una noticia trágica en el verano previo a la pandemia. En Rancul, pueblo de no más de 3500 habitantes, un adolescente mata a otro frente a la plaza, a la hora del paseo dominguero. Pero ésto no es el disparador de la ficción, sino el reclamo de la novia/viuda, encadenada a una columna de la municipalidad, pidiendo justicia. Ante las reverberaciones de heroína griega en ese gesto casi anacrónico, se gesta una escena en la que su protagonista tiene un día de furia en medio de la fiesta del pueblo. El trabajo de investigación y dramaturgia de La Fiesta del Hachero se inspira un poco en el (casi) postulado estético del autor francés Bernard Marie Koltés al encarar la creación de su obra magna Roberto Zucco: “No sabía gran cosa (...)tenía cuatro artículos de diario. Para mí es un mito y tiene que permanecer siéndolo” y en un taller virtual -durante la cuarentena por COVID 19- con el director catamarqueño Alberto Moreno como guía para encontrar el tono de esta pseudo tragedia. En esa introspección impuesta aparece la historia de ocho personajes que encarnan también la cadencia de los pueblos pampeanos, replicantes silenciosos de la letanía de Juan José Sena: “Todo es muerte, todo es muerte”.